La zorra y las uvas

Seguro que recordais aquella fábula en la cual una zorra encuentra una parra cargada de orondas y jugosas uvas. Intenta alcanzarlas de mil y una formas pero, al ser el pobre animal demasiado bajo, le resulta imposible. Al final, se rinde diciendo "¡Bah!. De todos modos estaban verdes..."

Este "post" viene a ser algo así, o una versión de "quien no se consuela es porque no quiere" referido a un tema que preocupa mucho a cierto "bloguero" del achopijo del cual no diré su nombre -empieza por "J"- pero que todos conoceis. El tema son las "nenas" y el ligoteo. Pues bien. Grandes noticias, chicos: ¡las tias "están verdes"!

Como buen "friki" que se precie, yo también sufro la falta de atenciones femeninas. O, mejor dicho, sufría. Como muchos de vosotros, perdedores, he tenido que constatar que ellas los prefieren brutotes y burros, Dios sabe por qué. Hasta que me he dado cuenta de la razón: ellas no son mejores que nosostros, y son seres iguamente vulgares, despreciables y de mal gusto, guiados por razones obtusas y sin el menor sentido. Una vez que se las ve en su verdadera magnitud, las cosas empiezan a encajar.

Los hombres tenemos profundamente inscrito en los genes la necesidad de gustarles a las nenas, y por eso nos vemos reducidos a peleles empeñados en bailarles el agua a las susodichas: cuidamos el lenguaje en su presencia, les regalamos peluches y otras memeces por el estilo, les cedemos el paso o nuestro asiento en el autobus, etc. Estamos pendientes de que nos suelten una sonrisita y ¡hala!, ya estamos "felices" y volvemos a casa con una expresión boba en la cara.

No hay nada más ridículo que un tío enamorado: su capacidad de razonar se ve reducida a cero. Todo lo que diga o haga "nuestra mejor mitad" es correcto, adorable, perfecto. Lo sé, porque lo he vivido y en verdad que es un estado beatifico, pero...

¡Pero yo os digo, hermanos: este estado no es permanente!¡Es falso, irreal, un truco químico autoinducido y temporal!¡Despertad!. Tarde o temprano -demasiado tarde para la mayoría, que ya se han arrejuntado "hasta que la muerte los separe" y se han encadenado con una ristra de niños comunes- se empieza a discernir que "esa tía" es tan mala o peor que nosotros mismos, llena de tantas manías y pegas como las que podamos tener nosotros y, lo que es peor, con manias y pegas odiosas que tendremos que soportar día a día, año tras año. A lo que era puro, virginal y maravilloso empiezan a notársele los kilos, los granos y...

Lo que era, en la práctica, una fusión perfecta, se deshace y los dos individuos originales empiezan a luchar por recobrar la individualidad perdida.

Los que ahora os lamentais de la soledad que "sufrís", no os dais cuenta del increible regalo que eso supone: la más absoluta libertad. Lo que pasa es que no conoceis el "encarcelamiento" que supone estar en el otro lado y no contemplais el paisaje desde la perspectiva correcta: podeis hacer lo que os venga en gana, no teneis que dar cuentas a nadie. Podeis planear una "escapada" de fin de semana perfecto, sin tener que contar con arrastrar a la novieta, la parienta o los niños. Podeis encerraros en vuestra habitación a ver ocho episodios seguidos de "Star Trek" sin tener que escuchar ningún reproche, sin oir un "¡madura ya!". ¡Si teneis suerte, podeis tener un "lio" con una "pilingui" sin que ello destroce vuestra vida y vuestro futuro!. Podeis...

Podeis vivir, en definitiva, como si siguieses teniendo quince años, pero sin mamá y papá vigilándoos. O no tanto, al menos...

Si ya llegais a la treintena y os desesperais por "estar solos", el consuelo perfecto es contemplar cómo les ha ido a vuestros compañeros, los "ligones" o los suertudos que siempre han contado -Dios sabe cómo- con una tía al lado: podreis comprobar como en la inmensa mayoría se han convertido o empiezan a convertirse en aburridísimos y tópicos "padres de familia" en el peor sentido de la palabra, agobiados por la vulgaridad de la rutina de sus vidas -ir de compras al super para toda la semana, llevar a los niños al inglés o a la piscina, todo eso-. Podeis ver, en definitiva, como toda la "chispa" y la imaginación empiezan a esfumarse. ¡Es la muerte de la individualidad, un terrible espectáculo! Ahora es cuando todos los "chistes" sobre los inconvenientes de la vida en pareja empiezan a hacerse realidad, cuando no es sólo algo que les pasa a otros.

Recordad: si vosotros sois un "desastre", no penseis que un "angel salvador" con forma de mujer os va a sacar del hoyo. Ella, al fin y al cabo, es un ser humano, con prácticamente los mismos fallos que vosotros mismos y otros nuevos, y con un montón de ideas sobre lo que espera de la vida que muy posiblemente difieran de las vuestras, y que no habrá manera de conciliar una vez que la relación, como un camión sin frenos, se "acelere" y embale cuesta abajo. Y si vosotros sois "frikis" es que, en el fondo, sois mejores -seres con imaginación, inteligencia y valores superiores, ¡qué os voy a decir...!- De modo que, en esa unión, teneis todas las de perder: sois vosotros los que tendreis que cargar con el peso de esa relación, el vuestro y el de ella.

Recordad: las chicas están verdes. ¿Quién las necesita...?